LA CAUSA DEL PROBLEMA
Hace unos días tuvimos la
oportunidad de analizar las Leyes de Migración y Extranjería y su
implicancia en la Contratación de Extranjeros.
Esta es la Ley 21325 del 20 de abril del 2022, y su Reglamento es el
Decreto N°177 del 14 de mayo del 2022 que establece las subcategorías
migratorias.
Además de la importancia de la
operatoria en la contratación de extranjeros, como asesores laborales, nos
preocupa las consecuencias para nuestros clientes si contratase trabajadores
sin autorización para laborar en Chile.
Para entender las sanciones primero debemos conocer cómo se clasifican
las empresas según el Código del trabajo:
Art. 505 Bis: “Se entenderá por
micro empresa aquella que tuviere contratados de 1 a 9 trabajadores, pequeña
empresa aquella que tuviere contratados de 10 a 49 trabajadores, mediana
empresa aquella que tuviere contratados de 50 a 199 trabajadores y gran empresa
aquella que tuviere contratados 200 trabajadores o más.”
Las sanciones calculadas al
día de hoy: micro empresa de $58.248 a $1.164.960, pequeña empresa de
$582.480 a $2.329.920; mediana empresa de $1.747.440 a $5.824.800, gran empresa
de $3.494.880 a $11.649.600.
Importante de destacar es que,
la sanción es por cada trabajador. Es
decir, si son 5 trabajadores ilegales, el Servicio de Extranjería y Migración
aplica la sanción multiplicada por 5 veces.
Lo otro relevante es que nadie tiene asegurado que apliquen la sanción
mínima. Si tenemos una micro
empresa, no podríamos decir que es injusto que nos apliquen la multa más alta
de $1.164.960, porque se ajusta a derecho.
Lo importante para el empleador
previo a la contratación, es identificar que el trabajador tiene una visa
temporal, que permite trabajar en Chile.
Hoy está prohibido que un extranjero con un permiso de residencia
transitoria trabaje en Chile. Si el
extranjero quiere quedarse debe cambiar su categoría en el Servicio Nacional de
Migraciones. Trámite de su exclusiva responsabilidad.
Todo tiene solución, pero el
problema se agrava con los extranjeros que ingresan a Chile por pasos no
habilitados. Y esa es la verdadera causa, que hoy implica sanciones para
empleadores que pueden obrar humanitariamente y de buena fe, pero que lo hacen
contra la ley, y por otro lado en seguridad pública vemos como la
delincuencia está siendo ejercida por extranjeros ilegales.
El Gobierno debe encontrar la
fórmula para ordenar nuestro país, ya que paradójicamente, los
extranjeros que llegaron a Chile, y en especial a Magallanes, y que son un
verdadero aporte con su profesión u oficio, nos eligieron buscando una mejor
calidad de vida. Pero los últimos
Gobiernos se confunden entre razones humanitarias, dejando con chipe libre el
ingreso de delincuentes, que incluso de acuerdo a diversos reportajes, se han
apoderado hasta de las cárceles de nuestro país, siendo más agresivos y crueles
que los propios delincuentes nacionales.
Tanto chilenos, como extranjeros que son un real aporte, tenemos el
derecho a vivir en paz.